27.4.09

Noticias varias.


Como tengo un poco abandonado este pizarrín os dejo unas cuantas noticias que han ido apareciendo en diversos medios sobre recursos educativos que nos pueden venir bien a los que llevamos esto de las TIC a las aulas.


En primer lugar, y ya era hora, gracias esencialmente a trabajos desinteresdados y voluntarios ya podemos disponer de WIKISPACE en castellano. Como me imagino que los que tenéis un Wiki tendréis dudas sobre cómo hacerlo, para ponerlo en Español accede a tu espacio y en “My Account” selecciona “Your Settings” y podrás cambiar las preferencias del idioma. Si el idioma de tú navegador tiene el español como lengua por defecto Wikispaces automáticamente mostrará tu wiki en español la próxima vez que accedas al mismo. O sea que muy fácil. Si prtefieres entrar en su Blog Oficial, pincha en el enlace.


En segundo lugar me han enviado un enlace a una web que se llama acapela.tv y en la que aparece un curios editor de películas de dibujitos animados (Cute Cartoon Creator), extremadamente simple y muy vistoso, que nos puede permitir trabajar con ella on-line, y generar multitud de trabajos muy útiles, para el aula, tanto para los más pequeños como para los más mayorcitos.


No me resisto a dejaros un enlace con la Biblioteca Digital Mundial de la Unesco que ha conseguido reunir textos, mapas y diverso material audiovisual en siete idiomas y que podemos consultar de forma totalmente gratuita toda una cantidad importantísima de documentos con fuerte valor cultural e histórico, en árabe, chino, inglés, francés, ruso, español y portugués.


Por último dejaros un enlace con una herramienta que ha sacado al uso el Portal You Yube y que ha denominado CaptionTube, y que nos va a permitir poder subtutular los vídeos de forma sencilla y rápida, lo que en determinados casos puede suponernos una inestimable ayuda en las clases. Esta herramienta nos permite tomar un vídeo de la sección de carga de YouTube . Luego, se le puede añadir subtítulos de forma similar al editor de anotación en pantalla de YouTube, seleccionando la duración que se desea que tenga cada título cuando aparezca, tomando puntos específicos de inicio y final. También puede crear y editar múltiples idiomas de subtítulos al mismo tiempo, que se presentan como pistas separadas en la línea de tiempo.

22.4.09

Hola con adiós.


Hace más de una semana que no dejo constancia de mi paso por este hijo virtual al que llamé El Pizarrín. Casi que no vale la pena poner excusas en el trabajo, los compromisos, la pereza, etc... porque sin duda ha sido una mezcla de todo lo que me ha mantenido alejado de él.

Muchas cosas han pasado desde esta última entrada. Ha habido cambios de gobierno, partidos de fútbol, aparición de revistas y herramientas educativas, etc... pero yo llevo varios días queriendo dejar constancia de un hecho que a mí, personalmente, me ha parecido importante: el fallecimiento de Corín Tellado.

Es curioso que una de las entradas que más aceptación ha tenido en el blog ha sido la que dediqué a D. Marcial Lafuente Estefanía, quien junto a Corín representó, en una España donde cada persona tenía las labores propias de su sexo, la posibilidad de escape, de vivir una realidad ajena a la que cada día se encontraba al abrir los ojos.

Escribir sobre Corín Tellado supone hacer un buceo en la memoria, pero no en esa memoria al detalle del costumbrismo, sino en la memoria sensorial, la que llenaba las mentes de los niños en aquellos finales de los 60 y primeros 70, cuando todo era algo a lo que buscar respuesta. Escribir sobre Corín Tellado es volver a imaginar el puesto que María Lozano tenía frente a mi casa, oscuro, tras cuyo mostrador había una mesa camilla y al fondo, en un trasluz tenebrista, tras una cortina a medio recoger, se encontraba la casa de María y su marido.Es recordar olores, voces, comentarios de las mujeres que allí se reunían en sus escasos momentos de asueto para cotillear lo que había pasado o podía pasar, y donde por unos céntimos o pesetas, cambiar una novela por otra, con el asesoramiento literario de quienes ya la habían leído.

Buscando en muchas antologías y/o historias de la literatura española nos encontraremos, que al igual que con D. Marcial, se ha hecho un vacío sobre estos escritores que no suelen ser nombrados, a pesar de que en el caso de Dª Corín, es la escritora más leída en castellano tras Cervantes, o que en sus mejores momentos vendía 100.000 ejemplares de sus "novelitas", en épocas en que supuestamente no se leía, pero en la que, como hoy, se necesitaba de un elemento que nos transportara más allá, que nos permitiera con sencillez entrar y participar de un mundo distinto, anhelado. Un mundo tan distinto al nuestro que sólo lo pudiéramos ver en esas novelitas, cortas, manejables, de fácil lectura que nos permitía tener un nuevo amor, una nueva identidad, una nueva ciudad, una nueva ilusión cada semana.

Pocas novelas de esta autora leí. Yo estaba educado en otro mundo y prefería leer las que mi abuelo hojeaba de D. Marcial. Y no voy a entrar en la calidad de dicha literatura, porque la calidad de un libro radica en lo que sea capaz de sugerir a quien lo lee. Bien es verdad que en sus libros las mujeres eran frágiles, bonitas,sensibles, esbeltas, de cuerpo escultórico. Y si nos pusiéramos a imaginarnos en otro mundo, ¿no nos gustaría ser así?

Tienen sus novelas un toque que podríamos decir que casi roza el erotismo:"las manos de su marido se perdieron ardientes en su cuerpo" o "sus dedos se perdieron bajo la bata" o"La besaba ya.Hondamente.Hurgando en sus labios".

También es verdad, que en contra de su propia vida real y de sus convicciones, utiliza una moral diferente cuando se trata de un hombre a cuando se trata de una mujer. Mientras el hombre puede, de hecho lo fomenta casi siempre, ser un juerguista mujeriego, la mujer se presenta, salvo excepciones, como inexperta, cándida, pura ,virgen y no ha conocido a ningún hombre antes que a su verdadero amor, con el que tras grandes sufrimientos, llega a la felicidad, todo ello en un ambiente lejano a la realidad de aquellos años, creando un decorado de lujos,fiestas, y ambientes románticos.

Valgan estas líneas para rendir un modesto homenaje a quien supo llevar a tantas y tantas mujeres, y algunos hombres, la posibilidad de sentirse otra, de poder vivir una realidad ajena que acababa al cerrar la novelita, pero que empezaba de nuevo en el kiosco de María Lozano al cambiar de novela, al cambiar de mundo, por unos céntimos, sabiendo que era un mundo de bolsillo, un mundo que cabía en poco espacio, el que dejaba salir el mundo real, ese mundo que Corín Tellado supo cambiar con sus novelitas, a pesar de que hoy, nadie quiera recordarlo.

14.4.09

Cultura digital y práctica educativa.


Traigo hoy aquí una revista que acaba de publicar un nuevo número y con una temática muy de mi agrado y adecuada a los tiempos que corren. La revista en cuestión se llama RUSC - Revista de Universidad y Sociedad del Conocimiento, que esta vez nos ofrece un monográfico al que han titulado "Cultura digital y prácticas creativas en educación", y que coordina el profesor Juan Freire.


Lo que más me ha gustado del primer vistazo que le he dedicado ha sido que, lejos de posturas oficiales y/o comerciales de tal o cual entorno digital, este número de la revista se acerca bastante a la realidad del día a día de los jóvenes, adolescentes y niños, ante la realidad virtual que les rodea y nos rodea a nosotros por igual.


Me ha parecido igualmente atractivo que participen en el proyecto gentes de la enseñanza y que a su vez están marcando el camino dentro de la educación y las TIC en nuestro país, gente sensata, cercana a las aulas y a sus realidades, y que ofrecen un cúmulo de sabiduría real, práctica y útil, que espero os deje un buen sabor de boca.


Por si os apetece esto es un adelanto de lo que podéis leer, encvabezsdo por uno de los maestros de cabecera de este Pizarrín, Aníbal de la Torre.


Cultura digital y prácticas creativas en educación - Juan Freire

Nuevos perfiles en el alumnado: la creatividad en nativos digitales competentes y expertos rutinarios - Aníbal de la Torre

El papel de la Universidad en la construcción de su identidad digital - Tíscar Lara

Educación online: plataformas educativas y el dilema de la apertura - Enrique Dans

La ineducación del tecnólogo - Jim Groom, Brian Lamb

Facebook. Esa reiterada tensión entre la sobrepromesa y la invención de nuevos mundos - Alejandro Gustavo Piscitelli

8.4.09

¿Educar para la crisis?


La entrada anterior me dejó dándole vueltas a unas cuantas ideas, no necesariamente relacionadas, fruto de esas asociaciones inusuales que nuestra mente tiene a bien hacer casi a nuestras espaldas.

Matar la creatividad en las escuelas no sólo depende del método, de los contenidos, del tipo de docente, etc... Va a depender también, y no descubro nada, de otros factores tan importantes como la visión que la sociedad tiene sobre qué es necesario que la escuela asuma como tareas básicas de educación.

En una cena con unos amigos salió, cómo no, el recurrente tema de la crisis. La postura que se defendía ardientemente por uno de los comensales es que todo este problema se habría solucionado mucho antes si la información que se hubiera puesto frente al ciudadano de a pie, hubiese sido mucho más cercana a la realidad, menos matizada y más cruda. Como ilustrativo ejemplo hacía referencia a las campañas que la DGT ha venido haciendo sobre los accidentes de tráfico y su notable reducción en los últimos años.

El debate se abrió, se hizo notar la presión de la modificación del Código Penal, los puntos, la mejora de las carreteras y de seguridad en los coches, etc... a la vez que nos planteábamos que el común de los ciudadanos no andamos muy sobrados de conocimientos económicos. Y hasta aquí todo hubiera sido habitual y previsible. Sin embargo, hete aquí, que una comensal, poco participativa hasta ese momento, pone sobre el mantel la pregunta de hasta qué punto la sociedad quiere recibir esa información. La verdad es que los argumentos de respuesta fueron muy pobres y absolutamente innecesarios cuando en su turno de réplica, argumento su idea inicial con un amplio abanico de ejemplos en los que demostraba que la sociedad actual no quiere ver los problemas cerca, quiere que se le solucionen sin que tenga que existir una implicación, un conocimiento, un mancharse las manos el propio individuo.

Ponía por caso el hecho de la muerte, aislada en hospitales independientemente del caso, y celebrada en asépticos e impersonales tanatorios que impiden el luto/duelo exclusivamente familiar, aumentando esa necesidad, cada vez más acuciante del ser humano actual, del sentimiento gregario, de no hacer algo sólo incluso los ritos más personales como los funerarios, a la vez que dejando en manos de desconocidos lo que antes era un proceso de integración y educación de los más pequeños en los aspectos más dramáticos de la sociedad, como la muerte, que lejos de ocultarse se entendía como un ejemplo de atención de la comunidad más cercana y una iniciación en los aspectos oscuros y desagradables de la sociedad, que hoy día se ocultan y por ende se impide su conocimiento y educación.

De ahí, decía esta persona, que aunque pudieran decirse con total seguridad los alcances de esta crisis, la gente no querría oírlos, igual que prefiere colaborar con una ONG que actúa a 5000 Km, que colaborar con un comedor asistencial que está junto a su casa, porque en el primer caso se siente bien sin implicarse, sin ver la realidad sucia de barrigas hinchadas, órganos mutilados, o el mal olor del vagabundo que lleva diez días sin ducharse durmiendo en el cajero donde saca el dinero con que pagar a la ONG.

En fin, que una semana de reflexión en la que uno parece no alejarse del día a día.

6.4.09

Creatividad y Escuela.

Hoy es el primer día de vacaciones tras ese fin de semana que podríamos llamar de transición.

El recuerdo que uno se lleva siempre, al menos quien suscribe, de cada trimestre que acaba es el de la evaluación que se ha hecho y sus resultados. Le da uno vueltas a esas actividades que no cuajaron, a las que no pudo realizar, las que vinieron a la mente cuando ya no era posible plasmarlas, las que ha tenido que hacer de forma "obligada", etc... También andan por los recovecos del recuerdo los alumnos y sus resultados, ese empujoncito a uno, ese recortillo a otra, siempre buscando activar algún mecanismo que les motive en el siguiente período escolar.

De todo ello procura uno alejarse en días como este, que son una especie de frontera virtual entre la rutina del trabajo, fin de semana, trabajo,... que marca un borrado de pizarra y nos prepara para volver a llenarla.

Sin embargo los docentes tenemos la problemática añadida (que supongo igual en pescaderos, sociólogos, futbolistas, ....) de relacionarnos, sobre todo, con otros docentes, por lo que aunque se busque un paréntesis de ausencia pedagógica, siempre se acaba, de una forma u otra, teniendo en la mente alguna cosa relacionada con la escuela.

En este caso me envía una buena compañera este vídeo, subtitulado, que plantea como reflexión si las escuelas de hoy día están matando la creatividad. El personaje que habla es Sir Ken Robinson, en las TED (Technology, Entertainment, Design) Conferences. Me pareció cuando menos merecedor de un ratito de atención y por eso os lo dejo.

1.4.09

Las vacaciones de los maestros. (Ah, y de las maestras)

'Las vacaciones de los maestros'

LOLA VILLAR LAMA EL MUNDO marzo de 2009
La autora reflexiona sobre el deterioro progresivo de la figura del profesor en el sistema educativo español

El actual sistema educativo, la ineficacia de las instituciones públicas y la irresponsabilidad de las familias en la educación de sus hijos, nos han convertido a los profesores (mejor docentes) en los responsables del fracaso de las nuevas generaciones; fracaso no sólo académico sino también educativo. Los centros ya no se llaman centros de enseñanza sino «centros educativos» y este cambio no es sólo una cuestión de moda terminológica –consecuencia de una mala traducción al español del termino inglés education- sino que lleva implícita una gran carga ideológica.

La educación de las nuevas generaciones, el conjunto de competencias sociales –como les gusta decir ahora a los pedagogos-, queda en manos de los profesores que, habiendo estudiado Biología, Física o Filosofía, tienen que dejar de ser transmisores de sus conocimientos y convertirse en padres adoptivos o párrocos de esta nueva sociedad. El resultado es desastroso pues el papel formador de la familia es insustituible. La ideología progresista dominante ha hecho un gran esfuerzo para poner la educación en manos de los centros educativos -desde el Engels «El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado» encontramos en la izquierda una hostilidad y desconfianza hacia las capacidades formativas que de manera eficaz ha ejercido la familia y el resultado ha sido que nuestros alumnos saben menos y están peor educados. El último intento de llevar la responsabilidad de educar a los institutos es la polémica asignatura de «Educación para la Ciudadanía ». Como profesora de Filosofía, tuve que impartirla el curso pasado y, aparte de contrastar su inutilidad, llegué a la convicción de que el problema no es el contenido del currículo, cuestionado por aquellos que se oponen a ella, sino la idea que subyace a todo el planteamiento en el sentido de que se nos hace responsables a los profesores del civismo de las futuras generaciones. Una cuestión que habría que añadir a toda esta problemática viene determinada por la necesidad de las familias de compatibilizar su vida laboral y familiar. Eso es algo incuestionable y a lo que las instituciones públicas deberían buscar una solución. La iniciativa de la Consejería de Educación de adelantar el curso escolar una semana con la doble finalidad de compatibilizar esos dos ámbitos y luchar contra el fracaso escolar es pura demagogia. En primer lugar, porque hace recaer sobre el profesorado una nueva responsabilidad de «guardia y custodia»; en segundo lugar, porque la calidad de enseñanza no se consigue aumentando el periodo lectivo, ya de por sí agotador para los alumnos.


En cuanto a la primera finalidad, creo que la sociedad necesitaría saber más sobre nuestro trabajo para poder hacer un juicio más objetivo sobre la medida. Nuestras actitudes laborales, si somos buenos profesionales -que los somos muchos- son parecidas a la de los buenos estudiantes: seguimos trabajando en casa por las tardes y fines de semana. Por otra parte, como profesionales con titulación universitaria, cobramos menos que si ocupásemos cualquier otro puesto de la misma categoría en la Administración.

Si no fuese por la recompensa de las vacaciones, y porque además a muchos nos gusta enseñar, la enseñanza quedaría como último recurso en el abanico de posibilidades que un licenciado tiene cuando termina en la Universidad, algo que ya está ocurriendo incluso con la actual dosis de vacaciones de la que disponemos.

Si miramos a Europa, las vacaciones escolares son iguales, o incluso más largas que en España (en la mayoría de los casos la diferencia es que están más repartidas a lo largo del año), estando muchos países europeos muy por encima del nivel académico de nuestros alumnos. La Administración no puede hacer recaer en los profesores la función de custodia que podrían llevar a cabo los monitores de tiempo libre. No se le exige, por ejemplo, al pediatra que se haga cargo de nuestro hijo, una vez que ha sido tratado de su problema médico. Por otra parte, si realmente se quiere una mejora de la calidad de enseñanza, las instituciones educativas deberían sustituir al profesorado de baja de forma eficaz, controlar más las faltas del profesorado (algunos de ellos auténticos expertos en absentismo laboral) y disponer de inspectores especialistas que nos ayuden en nuestra práctica docente (todos sabemos la ineptitud de algunos compañeros, como ocurre en todas las profesiones). Pero, es mucho más fácil para ellos solucionar los problemas recurriendo al sentimiento generalizado de «las excesivas vacaciones que tienen los maestros». Resultaría deseable, por lo demás, plantear una modificación del estatuto de la función pública, pues no se entiende que trabajadores que no están rindiendo en su cometido puedan estar cobrando de la empresa sin ofrecer nada a cambio durante toda su vida laboral.

En definitiva, es necesario que el docente vuelva a ocupar el puesto que siempre tuvo en nuestra sociedad: ser fundamentalmente transmisor de sus conocimientos y destrezas profesionales, aunque de forma transversal e inevitablemente (también inherentemente a su trabajo ) pueda ser también transmisor de valores. La sociedad saldrá ganando con ello.


Lola Villar es profesora de Filosofía en el Instituto Néstor Almendros de la localidad sevillana de Tomares

Y sin comentarios, salvo los añadidos.