
Y es que esto de la educación, me doy cuenta al cabo de muchos años, tiene que ver bastante con los enfados. Y eso que, para mí, hay enfados buenos, como el que uno se coge cuando los alumnos/as no entregan algún trabajo, o cuando por más vueltas que uno le da a una explicación no consigue que los chavales/as la entiendan, enfados que te demuestran a tí mismo que todavía te sigue importando ese día a día que uno vive en cada aula; sin embargo no es de esos enfados de los que hablo. Me refiero a la falta de interés que los politicastros del momento, pasado, actual y futuro,le dedican a la educación.
Desde hace meses llevamos leyendo y escuchando cómo a nuestros políticos se les llena la boca hablando de la reducción de la ratio en los centros andaluces. He aquí que de pronto, en Cádiz, el IES La Paz recibe la noticia de su cierre por la "alarmante falta de matrícula". Esto, no sólo se contradice con lo que les gusta decir a bombo y platillo sobre lo que es la educación, y en concreto sobre la disminución de la ratio, sino que demuestra que para los que dirigen, administran y legislan, sobre educación, sólo están interesados en que sus planteamientos se cumplan, independientemente del deseo y la necesidad de los que se verán afectados por esas decisiones.
¿Tan difícil es repartir la matrícula de la zona en que se encuentra el IES La Paz, entre los institutos de la zona (distantes en muchos casos menos de 1 Km) para que todos puedan reducir su ratio? ¿Se ha tenido en cuenta la trayectoria del centro, sus programas educativos, la calidad de los mismos, la inversión (educativa que no económica) que podría hacerse en calidad de la zona con una ratio menor de la actual?
Me temo que no. Que sólo se ha contemplado que como hay poca demanda, cerramos el centro, abrimos una línea nueva en el de al lado (masificación en 2 o 3 años, y en el peor (?¿) de los casos la cedemos a un concertado.
Desde hace años los docentes públicos de Cádiz capital, venimos asistiendo al paulatino cierre de los colegios e Institutos públicos de la ciudad, a la vez que la demanda de matrícula en los centros concertados aumenta. ¿Por qué en los últimos 25 años no se ha cerrado un sólo centro concertado en Cádiz y sí públicos? Siguiendo la línea argumental de nuestros dirigentes (defensa de la educación pública de calidad, inversiones en la escuela pública, plan de calidad, bla bla bla), si tengo un centro público y quiero que haya matrícula, no sería más lógico que no se le concediera, de principio, de oferta, a los centros concertados y se mantuviera en los públicos?
Me temo que el hecho de ser funcionarios facilita que el "jefe" te asesore de que es mejor irte al colegio de al lado, antes que protestar, no sea cosa que venga el tío Paco (Paco,....Francisco... ¡ qué francos son!)con las rebajas y... te toque.
Mientras a seguir, cada año, con ese artículo sin escribir pero que tenemos en mente y que llamaremos igual que el de este año, "El triste número de la Educación".