2.7.07

El silencio de los colegios.


El silencio de los colegios es luminoso y triste. Aquellos que estamos acostumbrados a estar en ellos la mayor parte del año nunca nos damos cuenta de la algarabía diaria en la que nos movemos, hasta que acabado el curso, vacías las aulas, tenemos que andar por ellas recogiendo los restos del naufragio educativo que supone el fin de las clases. Al igual que Robinson recogía de la playa aquello que le podía ser útil, los maestros recogemos y guardamos una poesía, un dibujo, un poster, una fotocopia de una web,...pequeños restos que, a lo mejor, nos ayudan el año que viene a sobrellevar mejor algunas actividades.

A lo que no nos acostumbramos nunca es a llevarnos ese silencio, casi solemne, que inunda las aulas, los corredores, los patios. Supone casi un sacrilegio el romperlo y muchas veces hablamos en voz baja con los compañeros como en un ritual aprendido en secreto y nunca revelado. El silencio. El más bello sonido tras la música, excepto en los colegios.

1 comentarios:

indianshawls dijo...

nice blog